Analia Hoola se crió en Argentina, asistió a la universidad en los Estados Unidos, y se casó con un hombre de los Países Bajos. Mudándose entre tres continentes, la familia Hoole se ha dado cuenta que el evangelio puede marcar una diferencia para familias en todo el mundo. (Click here to read the interview in English.)

Díganos un poco sobre usted. ¿Donde nació?

Nací en Mar del Plata, Argentina. Mis padres conocieron el evangelio cuando eran adultos solteros. A las 17 me mudé a New Albany, Ohio. Ahí viví por dos años y después fui a BYU-Idaho.

Analia Hoole

Mis abuelos de parte de mi mamá son de Bélgica. Y aunque ellos murieron cuando yo todavía era chiquita, en el 2005 viajamos a Bélgica con mi familia para sacar el pasaporte belga. Estábamos buscando un lugar para alquilar durante mi estadía en Bélgica. Mi hermano dijo que él conocía a Jurgen, alguien de los Países Bajos que sirvió durante el mismo momento en su misión en Utah, unos años antes.

Así que lo llamó, y Jurgen le dijo que en Bélgica no sabía de algo que pudiéramos rentar, pero que, ya que estábamos relativamente cerca, nos invitó a atender el campamento de los JAS (jóvenes adultos solteros). Fuimos a los Países Bajos para el campamento y nos hicimos amigos. En ese momento yo estaba estudiando en BYU-Idaho. Cuando más adelante decidimos casarnos, yo me mudé a los Países Bajos. Juntos tenemos 5 hijos los cuales todos nacieron en los Países Bajos. Tenemos dos nenas de 12 y 11 años y tres nenes de 9, 5 y 1 año.

¿Cuál ha sido la reacción de sus vecinos y amigos en diferentes países al tamaño de su familia? Sé que en muchas partes del mundo ya no es común tener más de uno o dos niños.

Siempre que digo que tengo 5 hijos, la gente reacciona muy sorprendida. En Argentina, muchas veces me preguntaron si los tenía todos con el mismo esposo. Yo siempre lo he expresado desde mi punto de vista, de mi amor por los niños, y mi deseo desde niña de tener una familia grande. Creo que es importante que cada pareja haga lo que sea mejor para ellos.

Si hay un tema prominente en mi vida es el de mudarme siguiendo la voluntad del Señor. He vivido en diferentes ciudades y países y siento que cada vez que me mudé el Señor nos estaba dirigiendo y tratando de enseñar algo diferente. (Estuve 17 años en Argentina, 4 en USA (2 en Ohio y 2 en Idaho), 11 años en los Países Bajos (3 en La Haya, 2 en Enkhuizen, 6 en Lelystad), 2 años en Argentina (1 en Mar del Plata y 1 en buenos Aires), 1 año en los Países Bajos de nuevo, medio año en Buenos Aires otra vez, y ahora hemos regresado a los Países Bajos.

Analia and her family

¿Qué ha aprendido en todas las mudanzas de su vida?

¡Hemos aprendido tanto! Por estos viajes, he crecido personalmente y hemos crecido como una familia. He aprendido confiar en el Señor y pedir su guía. Estas mudanzas no son coincidencias, sino cada vez hemos conferido con Dios y le hemos pedido guiarnos a dónde necesitamos estar en ese momento. Cada vez ha sido el resultado de mucha oración y consultación con el Señor. Las experiencias que hemos tenido nos han ayudado a aumentar nuestra fe y nos han llevado a entender que es lo que nosotros personalmente y como familia podemos aportar al mundo. Hemos aprendido cómo hacer funcionar más efectivamente como familia, cómo mejorar nuestra relación personal y como familia con nuestro Padre Celestial.

Como alguien casada con un hombre de los Países Bajos y con cinco hijos nacidos en ese hermoso país, he aprendido a apreciar algunas cosas sobre cómo se cría a los niños en esa cultura. En los Países Bajos, los niños se acuestan entre las 7 y las 8 p. m. Dormir muy poco trae consigo problemas de comportamiento y problemas de salud. Los niños que duermen bien tienen sistemas inmunológicos más saludables y se desempeñan mejor académicamente, se comportan mejor y tienen una mejor salud mental. Los niños de los Países Bajos comen más sano que en otros países y leen mucho. Los niños van a la biblioteca con sus padres y leen juntos. Y a los holandeses les encanta estar afuera. ¡Salen y hacen todo, aunque llueva, granice o nieve! Me di cuenta de que las cosas que pensaba que eran “normales” son diferentes en otros países. Es muy normal andar en bicicleta en vez de usar el coche. A los holandeses les encanta montar en bicicleta, caminar, y estar afuera en general.

Una de las cosas que más de llamó la atención de la cultura argentina al haber vuelto a Argentina como madre, es cuán importante las familias son en Argentina. Por supuesto a los holandeses también les importa mucho su familia. Pero, por ejemplo, en Argentina si no va bien con algún familiar los llevan a su casa a cuidarlos y/o dejan otros de sus quehaceres y demandas para cuidar a ese familiar. Los miembros de la familia se cuidan y protegen entre sí, no con enfermeras de afuera.

Eso no se ve en Holanda. Si no va bien con tus padres o mandan una enfermera a la casa o se manda a esa persona a un hogar donde la cuidan. Las familias son importantes, pero primero se aseguran de su propio bienestar y estabilidad. En Argentina lo que vi es que dejarían mucho para cuidarse entre sí.

Aunque ningún país es perfecto, estoy agradecido por las cosas que he aprendido de los holandeses y de mi país que me han ayudado a organizar mi vida y mi familia. Será por eso que nuestro enfoco de familia es lograr dedicar nuestras vidas a fortalecer familias en el mundo. Hemos sido guiados a conocer a ciertas personas que son clave en el desarrollo de estos proyectos, como por ejemplo Alejandra, con quien decidimos empezar juntas Refugios Fuertes.

¿Puedes decirme un poco más sobre cómo conociste a Alejandra y cómo “nació” Refugios Fuertes?

Analia & Alejandra

En el 2019 mi familia y yo vivimos en Buenos Aires. Con mi marido íbamos al templo una vez a la semana y conocimos a Ezequiel, el marido de Alejandra, y nos mencionó que tiene una mujer e hijos y decidimos encontrarnos todos juntos. Con Ale nos hicimos amigas inmediatamente.

Una de las primeras veces que nos encontramos, Ale me comentó que le gustaría empezar un blog para mujeres. En el 2020 yo me volví con mi familia a los Países Bajos, pero con Alejandra nos seguimos hablando. Una vez yo le pregunté si había empezado el blog y me dijo que todavía no lo había empezado. ¿En ese momento pensamos, porque no lo hacemos juntas?

Empezamos los blogs y los podcasts porque vimos que en internet hay muchos recursos en inglés, pero muy poco en español, y nada como lo que estamos creando. Lo creamos desde una necesidad para nosotras mismas.

Ale hizo un planificador para el 2021 hermoso para compartir en el sitio y en unos dos tres meses más de 7000 personas lo bajaron. Para mí ese fue el momento que me di cuenta de que Refugios Fuertes era más que un hobby y que Nuestro Padre Celestial nos guio para conocernos y empezar este proyecto juntas. Con la comunidad de los grupos sociales queremos que ellas se puedan ayudar y apoyar entre sí. Cada una de ellas tiene experiencias y conocimiento que puede ayudar a alguna otra persona. ¡Cuánto más nos podemos ayudar entre las miembros del grupo, que si solo fuéramos Ale y yo las que comparten recursos y experiencias!

¿Cómo han combinado sus talentos para formar este compañerismo?

Ale es muy buena en el diseño, creatividad, escribir y el podcast. Yo tengo mucha experiencia con el Online Marketing, y sé cómo hacer para que el sitio web sea fácil y atractivo de navegar y cómo hacer para que le llegue a la mucha gente, como tener subscriptoras y ese tipo de cosas. Al principio no me animaba a escribir, pero Ale me animo y he escrito unos blogs y voy a estar escribiendo más en el futuro.
Creo que somos el ejemplo perfecto de como cuando nos unimos podemos alcanzar cosas que nunca podríamos haber soñado si lo tratáramos de hacer solas. Queremos que el contenido les sirva no solo a miembros de nuestra iglesia, pero a toda mujer cristiana y mujeres con buenos valores en la vida.

Tú escribes mucho sobre la salud mental, la organización de la familia, y la psicología- ¿cómo llegaste a tener tanto interés en cómo funciona la mente y las relaciones y comunicación interpersonal?

Desde que fui niña me intereso mucho la psicología, especialmente lo que es el comportamiento humano. En ese momento no entendía todavía lo que me interesaba, pero, por ejemplo, me acuerdo estar en el supermercado esperando para ir a la caja y al esperar mirar a la gente y preguntarme a mí misma, ¿porqué es que gente es como es y actúa como actúa? ¿Por qué una persona actúa de una manera y otra de otra? Es algo que siempre me fascinó. No lo estudie oficialmente (es algo que todavía me gustaría estudiar en el futuro), pero he leído y buscado yo misma mucha información sobre la psicología y el comportamiento humano. Creo que me ayuda a mí personalmente a mejorar porque me entiendo mejor y puedo ayudar también a mis hijos y otros. Cuanto más entendemos porque es lo que hacemos, cuanto más entendemos que podemos cambiar y elegir como actuar, en vez de reaccionar y dejar que las cosas pasen.

Unos de los temas que para mí personalmente me parecen más importantes es el poder tomar cada día un momento de alineación con nosotras mismas y Dios. Es un tema muy difícil para madres que sienten que no tienen tiempo para ellas mismas, porque tienen niños, o que tengan que trabajar, etc. Por muchos años me sentí estresada y exhausta por todo lo que sentía que tenía que hacer y lograr. Hemos visto que muchas mujeres se sienten inseguras o solas en sus roles. Muchas de las preguntas o inseguridades que ellas tienen son las mismas que nosotras u otras mujeres tienen.

En esa parte es la que nos enfocamos nosotras. ¿Qué herramientas, conocimiento y ayuda necesitamos personalmente como mujeres para llegar a lograr ser nuestra mejor versión? Necesitamos empezar por nosotros mismas. Esa es una lección que yo aprendí personalmente por mala experiencia. Cuando me casé empecé mi matrimonio con una mentalidad de dar todo. Mi pensamiento era que, si yo daba todo de mí, no habría otra opción de tener un matrimonio exitoso. Muchos años y niños después, me di cuenta de que estaba agotada, me di cuenta de que no podía dar más de mí porque no tenía más para dar, porque no me había cuidado a mí misma.

Definitivamente queremos ayudar a las mujeres a ser mejores lideres, porque no podemos ayudar a otros efectivamente o sin causar daño en nuestras vidas consistentemente, si nuestro fundamento personal no está firme. Una de las cosas que he visto en común en los diferentes barrios y países es la luz que emanan las personas que constantemente y activamente aplican el evangelio a sus vidas y construyen una relación personal con nuestro Padre Celestial Y Jesucristo. Pero también una de las cosas que he visto en común en el mundo es que hay solo unas pocas familias/personas sosteniendo a cada barrio. Son solo unos pocos los que rotan en los llamamientos más pesados.

Analia’s children

Creo que por el peso que estas personas llevan, muchas veces se estresan y su experiencia personal en la iglesia no es la que podría ser. He visto lideres que dejaron de asistir a la iglesia por agotamiento. Necesitamos esa fundación personal para después actuar en cualquier otro rol que tengamos en nuestras vidas. Y así poder también ayudar a otros, ser una luz en el mundo y hasta también descubrir cuál es nuestra misión y propósito en esta vida para así poder empezar a realizarla. Todo esto siempre teniendo la vista hacia nuestro Padre Celestial y Jesucristo y alineándonos a Él. El Elder Uchtdorf habló de este tema en su discurso “La restauración diaria” de la Conferencia General de Octubre del 2021.

Mirando a mis hijos como su madre, comprendo mucho mejor el amor que me tiene mi Padre Celestial. También entiendo mejor Su ayuda, paciencia y comprensión cuando cometo errores. Cuando mi bebé se cae al tratar de caminar, no pienso: “Qué tonto, ¿por qué se cayó?” Sé que es parte de la preparación y la experiencia lo que le ayuda a empezar a caminar. Estoy segura que nuestro Padre Celestial nos ve de la misma manera, con perfecto entendimiento y amor cuando cometemos errores.

¿Puede también decirme un poco de cómo ustedes encontraron LDS Women Project, por qué querían involucrarse?

Ale fue la que encontró el sitio de The LDS Women Project. Buscó en internet acerca de mujeres LDS y leyó todo lo que pudo encontrar acerca del tema. Le encantó desde el primer momento y lo compartió conmigo.

A mí me encantó el proyecto. Que hermoso es poder mostrar el ejemplo de otras mujeres, ver que todas somos importantes, diferentes y al mismo tiempo iguales. Porque sé que todas tienen un propósito en esta vida, no importa de dónde seamos o donde vivamos. A mí me inspira leer las historias de otras mujeres, y me ayuda a pensar en mi propósito personal y me ayuda a construir aún más mi fe y confianza para actuar.

Pero la mayor inspiración para el crecimiento y el cambio en mi vida ha sido Jesucristo y mi Padre Celestial. Siempre han estado a mi lado acompañándome. En cada etapa de mi vida, aunque en ese momento no me di cuenta, estaban ahí guiándome constantemente. Son mi fuente de fe y esperanza en mi futuro personal y en todos los ámbitos de mi vida. Yo sé que Ellos me aman y yo los amo también. Por eso, si tienes dificultades, ora. Cuéntale a nuestro Padre Celestial tus dificultades y pídele que te ayude. Él te dará la fuerza necesaria para crecer y cambiar para ser más como El.

LDSWP empezó una colaboración con Refugios Fuertes en junio de 2021 para traducir entrevistas a español.
LDSWP/RF anuncio de colaboración

At A Glance


Name: Analia Hoola

Age: 35

Location: Buenos Aires, Argentina / Apeldoorn, The Netherlands

Marital History: Married

Children: 5 children. 12, 11, 9, 4, and 1

Occupation: Online marketing tech specialist

Convert to the Church: Born in church

Schools Attended: BYU Idaho

Languages Spoken At Home: Dutch, Spanish, English

Favorite Hymn: How Firm a Foundation

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Interview Produced and Translated by: Jenny Willmore